En el artículo pasado hablaba sobre una confusión entre ambos tipos de humedades. Es algo muy común que pase. Por eso quiero desarrollar el tema mas en profundidad.

Primero quiero hablar de la típica humedad por filtración. Es la que todos conocemos.

Suele ocurrir cuando hay una pérdida de agua. Por ejemplo una de las tuberías de la vivienda se daña, y el agua empieza a salir por donde puede.

También suele ocurrir cuando hay un mal aislamiento de alguna zona de la vivienda. Y al llover, el agua comienza a filtrarse hacia dentro de la vivienda.

Si la perdida de agua es grande, es fácil de identificar. Verás gotas de agua cayendo. O un chorro de agua en el peor de los casos. Y está claro que hay una perdida.

Pero en otros casos no es tan simple de identificar. Por ejemplo cuando la perdida es pequeña. O se pierden algunas gotas cada tanto.

El agua siempre empieza a desplazarse hacia abajo por la gravedad. Sale por donde puede. Y puede impactar en alguna pared o techo.

Y en este caso veras marcas de humedad, aunque no siempre gotas. Si tocas la zona afectada se notará claramente la húmeda.

También podrían aparecer burbujas por el exceso de agua, y comenzar a desprenderse la pintura.

Otro indicador es que este tipo de humedad aparece solo en una parte del techo o pared. Esta es la zona donde impacta el agua. Pero en las zonas contiguas no hay ninguna marca.

Estas manchas pueden ser oscuras. Por ejemplo de color marrón, amarillo, o verde.

Si la filtración no se soluciona, las manchas de humedad van incrementando su tamaño rápidamente. Y además podría aparecer moho.

Para solucionar la humedad por filtración, hay que entender de donde viene primero. Si es una perdida en una tubería, hay que repararla antes que siga avanzando.

O si se esta filtrando agua de lluvia, entonces hay que reforzar la impermeabilización de la vivienda. Porque por algún lado esta ingresando a la vivienda.

Ahora veamos el segundo tipo de humedad, por condensación.

A diferencia de las anterior, la humedad por condensación se produce por humedad en el ambiente. Esta en aire. Y pasa a condensarse sobre una parte de la vivienda.

Para visualizar mejor, este es el fenómeno típico cuando sacas una botella fría del frigorífico o nevera. Si bien esta seca, rápidamente se empiezan a formar gotas de agua en la parte exterior de la botella. Inclusive si esta cerrada. Esto es por la diferencia de temperatura de la botella con el ambiente.

A mayor diferencia de temperatura, mayor condensación. Y a mayor humedad en el aire, mayor condensación también.

Y esto ocurren dentro de la vivienda también. Un caso muy común es el baño. Al tomar una ducha en invierno, el ambiente se calienta, y queda vapor de agua en el aire. Al entrar en contacto con las paredes o techos fríos, el agua se condensa sobre ellos. Y empieza a aparecer la humedad por condensación.

Otro caso común es en paredes que dan al exterior de la vivienda. La pared se enfría. Y al entrar en contacto con el aire caliente (y húmedo) dentro de la vivienda, el agua se condensa. Y se produce humedad sobre la pared.

Estas humedades se ven inicialmente como pequeñas manchas, quizás menores a un centímetro. Pero comienzan a crecer con el tiempo si el problema no se soluciona.

Al quedar la zona húmeda constantemente, genera moho. Y este es de color negro o verdoso.

Otra característica es que suelen aparecer mayormente en partes altas de la vivienda, como techos o zonas superiores de paredes. Aunque también pueden ocurrir detrás de muebles.

Si la humedad recién se están creando, no hay daños en la superficie afectada. La mancha es solo superficial. Es fácil de limpiar con una bayeta. Ahora, si el moho empieza a crecer, podría quedar marcado en la pared o techo. Y requiere una limpieza mas profunda. O pintar nuevamente la zona.

También podría generarse desprendimiento de la pintura de la pared o techo. Pero esto es menos común.

Como la humead se genera desde el ambiente, en este caso no hay ninguna tubería a reparar.

La solución principal para la humedad de condensación es aumentar la ventilación de la vivienda. Abrir ventanas. Con esto tanto la humedad como la temperatura interior se iguala con la del exterior. Y no hay condensación.

Sobre todo hay que ventilar después de usar la ducha en el baño. O usar un extractor de baño.

Sirve también abrir las ventanas en invierno, al menos una vez al día, para ventilar. Sobre todo en las habitaciones que dan al exterior de la vivienda.

En caso que no podamos abrir las ventanas demasiado, por ejemplo el invierno, sirve también des-humidificar el ambiente. Por ejemplo colocar utilizar un aire acondicionado o bomba de calor, que tienen funcionalidades de reducir la humedad del ambiente.

Creo que con estas descripción ya tenemos una base para entender las humedades por filtración, y por condensación. Lo mas importante es aprender a diferenciarlas. Porque se solucionan de forma diferente.

En caso de dudas también sirve buscar algunas imágenes en Google.

Hay un tercer tipo de humedad también, del cual no he hablado todavía. Es la humedad por capilaridad. Se produce en paredes bajas, cuando la humedad del suelo sube por las paredes. Pero no profundizaré en esto por hoy.

Te deseo suerte con la identificación de tus humedades. Y espero te sea útil para resolverlas.