En el artículo pasado te contaba el principio de esta historia. Unos de mis inquilinos estaban saliendo del piso.

Por mi parte quería varias cosas. Primero encontrar un nuevo inquilino. El adecuado. Eso quiere decir pasando todo mis filtros.

También quería hacerlo en un periodo breve. Otras veces he tenido muchos llamados y mensajes, y me ha llevado varias semanas el recambio. Y quería optimizar esto. Sobre todo, quería optimizar mi tiempo.

La realidad es que el día de la salida (día 0) ya tenia 2 candidatos potenciales que habían visitado el piso. Esto ya es un gran avance.

El proceso sigue así. Al otro día siguiente (o, sea, día de salida +1), envío la documentación pedida para el seguro de impagos. Hay algún documento que firmar, y otro que pedir. No suelen tenerlos en el día.

Pero al día siguiente (día de salida +2) ambos me envían la documentación pedida. Sin embargo uno me dice que tiene urgencia por ingresar al piso. Y tiene mayor antigüedad laboral, e ingresos mas sólidos. Por eso prefiero a este candidato. Candidato solido y quiere entrar rápido. Ideal para mi.

Presento la documentación temprano al seguro de impagos. Y lo aprueba en solo 1 hora. Ya conozco el bien proceso y al comercial del seguro que me atiende. Por eso puedo hacerlo rápido. Y con excelentes condiciones (3% del valor de la renta).

Ya estando aprobado el seguro de impagos, me comunico con el inquilino. Le ofrezco juntarme por la noche para firmar. Era tarde, a las 8. Pero tenia urgencia por ingresar y mudarse. Y sin dudas lo acepta.

Mas tarde nos juntamos y ve por primera vez el piso. Así es. Lo había visto sólo por videollamada y video. Sabían que las buenas oportunidades se van rápido. Pero al verlo se quedan tranquilos. Todo esta como les había mostrado.

En el piso la firma me llevo casi 2 horas. Pero están mas que bien invertidas. Porque explico puntos importantes, y evito malentendidos mas adelante. Esto me genera una buena relación inicial con el inquilino.

Por ejemplo, repaso el contrato. Les hablo sobre los puntos mas importantes. Hablo sobre cuidados básicos del piso. Como se hacen los pagos. Las copias de las llaves. Como usar algún electrodoméstico medio complicado. El termo. El cambio de suministros. La limpieza. La garantía. Como se devuelve el piso. Los vecinos. Y muchas cosas más.

Pero en fin. Me pagan, firmamos, y entrego las llaves. Y se quedan muy agradecidos de tener un nuevo hogar. Y yo salgo contento también de haber cerrado el proceso.

Por otro lado, aviso al otro candidato que no ha sido seleccionado. Podría haber avanzado. Sin embargo no sucedió. No le agrada la situación. Es lógico.

Inclusive me pide enviarme el dinero en el momento para reservar el piso. Pero le explico que no podemos avanzar, y que he avanzado con el segundo candidato. También me menciona que mi hogar era perfecto, y pensaba que ya estaba reservado. Lo cual me da mucha pena.

Como aprendizaje, la próxima vez debería aclarar mejor el proceso de ingreso. No quiero generar malentendidos. Visitar un piso, o enviar documentación, no garantiza su reserva. Si bien lo aclaro inicialmente, debería reforzar esta comunicación.

Me gusta también revisar las estadísticas de los contactos. El embudo. Publiqué en un solo portal. Recibí 64 contactos en 12 días de publicación. De los cuales tuve 5 llamados con inquilinos potenciales. De esos 5, descarté 3 de ellos. Los otros 2 visitaron el piso. Y elegí a uno.

Para ir cerrando este articulo, en resumen el cambio de inquilino en este caso fue rápido. Más sencillo de lo que yo esperaba. Tuve suerte. Porque muchas cosas, que no controlo, pueden fallar. Pero no fallaron esta vez. Pero también la experiencias previas me permitieron ir mejorando y controlando mejor el proceso. Y hacerlo como yo quiero.

¡Hasta la próxima!